Sangre, sudor y lágrimas. Como si de una realidad alternativa se tratase, la décimo octava edición de Zegama Aizkorri dejó de lado el barro y la lluvia, tan habituales en la localidad guipuzcoana y el Parque Natural de Aizkorri-Aratz, para embadurnar la jornada de trail running por excelencia con un sol abrasador, casi asfixiante.
Los 42,195 kilómetros de la gran prueba inicial de las Golden Trail World Series 2019 se hicieron eternos, tanto para los corredores como para los miles de aficionados que coparon las laderas de la ya emblemática subida de Santi Spiritu. Bajo un calor que consiguió subir la temperatura de una carrera marcada en rojo en el calendario por todos los amantes de la montaña, la élite mundial de este deporte sufrió para acabar un recorrido de dureza y belleza sin igual.
Y como ya es costumbre en Zegama, ya sea con barro y lluvia o a pleno sol, el rey de las carreras de montaña, Kilian Jornet, volvió a hacerse con la victoria, la novena. La que, aún por entonces, no sabía que sería su última Zegama vistiendo Salomon. El catalán, esta vez, celebró su triunfo junto a una inesperada protagonista, Eli Anne Dvergsdal, que dio la campanada y finalizó primera en la categoría femenina.